La discriminación en contra de las personas LGBTQ+ vulnera nuestra dignidad e integridad. Por ello, quienes pertenecemos a esta comunidad ajustamos conscientemente nuestro comportamiento para protegernos de posibles agresiones. Considerar este hecho es, entonces, imprescindible para dimensionar los costos sociales de la discriminación.
En un artículo publicado en la revista académica Labour Economics, 1 Emilio Gutiérrez y yo evidenciamos que hay menos personas LGBTQ+ en los sectores laborales menos incluyentes en nuestro país. Aunque resulte difícil dar una interpretación causal, documentarlo es un paso importante para comprender las desventajas que enfrenta la comunidad LGBTQ+. Nuestro trabajo se suma a la evidencia existente para otros contextos que muestra que las personas LGBTQ+ son más reacias a salir del clóset en su lugar de trabajo 2 y que, en países de altos ingresos, lxs trabajadorxs LGBTQ+ tienden a colocarse en ocupaciones que son más amigables hacia la comunidad LGBTQ+. 3
Documentar la correlación entre el nivel de homofobia 4 en un sector y la prevalencia de población LGBTQ+ no es una tarea fácil. El primer obstáculo consiste en obtener mediciones confiables, pues cuando existen costos sociales, tales como estigma y discriminación, las personas LGTBQ+ somos más renuentes a revelar nuestra identidad. Igualmente, las personas pueden ser más cuidadosas al expresar opiniones homofóbicas abiertamente. Sin embargo, sabemos que garantizando anonimidad y privacidad a la persona encuestada podemos obtener respuestas más certeras. 5
Considerando lo anterior, Emilio Gutiérrez y yo diseñamos y realizamos una encuesta en línea a casi 10 mil personas. Nuestra muestra consiste en personas de entre 18 y 65 años, activas en el mercado laboral y que viven en alguna de las 13 ciudades más grandes de México. Aunque la encuesta no es representativa de todo el país, nuestra muestra aproxima la distribución de algunas variables de la población como género binario (hombres vs mujeres), edad y densidad poblacional por ciudad.
Nuestro primer objetivo era medir el tamaño de la población que se identifica como parte de la comunidad LGBTQ+. Para esto, implementamos distintas preguntas que consideraban tanto la autoidentificación como sentimientos de atracción hacia personas del mismo género. Encontramos que en promedio el 11% de nuestra muestra se considera parte de la comunidad LGBTQ+. También vemos proporciones significativamente mayores de personas LGBTQ+ entre la población más joven, pero ninguna diferencia por género binario, nivel educativo y nivel socioeconómico. 6 Sin embargo, la diferencia más grande en prevalencia de población LGBTQ+ es por sector laboral.
La Figura 1 muestra estas proporciones para los ocho sectores grandes que consideramos. Como se puede observar, la proporción de población LGBTQ+ crece al doble entre el sector con menor prevalencia (gobierno) y el sector con mayor presencia (ventas). Estas diferencias se mantienen incluso controlando por otras características como edad, género, educación y ciudad de residencia. Entonces, naturalmente surge la pregunta de cómo se correlaciona este resultado con el nivel de homofobia en cada sector.
Para medir sentimiento homofóbico, utilizamos dos preguntas: si considerarían que una pareja del mismo género debería poder adoptar hijxs y si preferirían trabajar cercanamente con una persona heterosexual. Juntamos ambas en un índice de homofobia, tomando solamente las respuestas de quienes afirman ser heterosexuales. De igual manera, juntamos las preguntas de identidad no-heterosexual en un mismo índice LGBTQ+.
La Figura 2 muestra la correlación entre nuestros índices de población LGBTQ+ y homofobia. Cada marcador corresponde a un mercado laboral, definido como un sector, formal o informal, en cada ciudad (CDMX, Monterrey, Guadalajara u otra). Encontramos entonces una fuerte correlación negativa. Esto indica que en los mercados laborales donde hay mucho sentimiento homofóbico también hay menos presencia de población LGBTQ+.
Aunque no podemos afirmar que la homofobia causa que menos personas de la comunidad LGBTQ+ entren a estos mercados laborales, esta correlación negativa invita a la reflexión y abre la puerta a más investigación. Podríamos preguntarnos si los estereotipos sobre las preferencias profesionales de la población LGBTQ+ en realidad se deben a preferencias, o si son el resultado de barreras y costos sociales. Incluso si estos costos no son suficientes para desanimar a las personas LGBTQ+ de seguir trayectorias profesionales específicas, esta correlación sugiere que al menos podrían disuadirlas de revelar libremente su identidad.
Igualmente podemos pensar que si un factor importante de esta correlación es que la presencia de personas LGBTQ+ reduce la homofobia (por ejemplo, a través de la exposición), 7 entonces implementar políticas que protejan a la comunidad LGBTQ+ de las consecuencias negativas de expresar plenamente sus identidades pueden ser importantes para reducir el estigma, cambiar actitudes y fomentar la igualdad de oportunidades para la comunidad.
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* Adrián Rubli (él) es doctor en Economía por la Universidad de Brown y profesor-investigador de tiempo completo en la División de Negocios del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM). El autor agradece el apoyo de Zaid Cano en la elaboración de este texto.
1 Gutierrez, E., & Rubli, A. (2024). LGBT+ persons and homophobia prevalence across job sectors: Survey evidence from Mexico. Labour Economics, 87, 102500.
2 OutNow, 2015. LGBT diversity: Show me the business case report. http://www.outnow.lgbt.
3 Del Río, C., & Alonso-Villar, O. (2019). Occupational segregation by sexual orientation in the US: exploring its economic effects on same-sex couples. Review of Economics of the Household, 17, 439-467. Plug, E., Webbink, D., & Martin, N. (2014). Sexual orientation, prejudice, and segregation. Journal of Labor Economics, 32(1), 123-159.
4 En este texto utilizo el término homofobia para englobar todo tipo de sentimiento LGBTQ+ fóbico. A pesar de ser una simplificación, considero que es un término más ampliamente entendido entre la población general.
5 Coffman, K. B., Coffman, L. C., & Ericson, K. M. M. (2017). The size of the LGBT population and the magnitude of antigay sentiment are substantially underestimated. Management Science, 63(10), 3168-3186.
6 Aunque no tenemos evidencia directa, esta mayor proporción entre la gente joven pudiera deberse a que enfrentan costos sociales menores de asumir su identidad libremente, especialmente comparado con generaciones anteriores.
7 En otros contextos se ha encontrado evidencia a favor de la hipótesis de contacto: conocer y socializar con personas diversas reduce el odio hacia grupos vulnerables. Ver, por ejemplo, Bursztyn, L., Chaney, T., Hassan, T. A., & Rao, A. (2023). The Immigrant Next Door. American Economic Review.