La inversión representó 24.3% como porcentaje del PIB en el tercer trimestre de 2024 y el semáforo económico de inversión se encuentra en verde. Creció 1.1% respecto al segundo trimestre del año, producto de una disminución de (-)0.6% en la inversión pública y de un incremento de 1.4% en la privada.
- La inversión permite que las empresas y la actividad económica crezcan, se vuelvan más productivas y generen más empleos para la población. Fomentar mayores niveles de inversión en un país resulta el principal detonador de crecimiento económico.
- Para la nueva administración será crucial crear estrategias para evitar la desaceleración de la inversión pública y al mismo tiempo priorizar la rentabilidad social de proyectos de inversión, solo así se puede garantizar crecimiento económico con bienestar social.
- La formación bruta de capital fijo (inversión) en México cierra el tercer trimestre de 2024 (3T2024) con un crecimiento de 1.1% respecto al segundo trimestre del año. Esta variación trimestral es producto de una disminución de (-)0.6% en la inversión pública y de un incremento de 1.4% en la privada.
- En su comparación anual, la inversión creció 1.4% respecto al mismo periodo del año anterior. Esta variación anual es producto de un incremento de 2.7% en la inversión privada y una disminución de (-)8.6% en la pública.
- La inversión en el 3T2024 equivale al 24.3% del PIB nacional. El Semáforo económico de inversión se encuentra en verde.
- La inversión privada representa 21.6% del PIB, desde 21.0% en el trimestre anterior. La inversión pública representa 2.7% del PIB, al igual que en el 2T2024.
- En el 3T2024, la inversión privada representa el 90% de la inversión total en México y la inversión pública el 10%. La inversión privada es el principal motor de formación de capital, por lo que fortalecer la certeza jurídica es fundamental.
- La inversión en México cargó con estragos que iniciaron antes de la crisis ocasionada por la pandemia de Covid-19. El repunte observado en 2023 debe ser sostenido para impactar en la calidad de los empleos y la competitividad de la economía mexicana en el mediano y largo plazo.
- Después de alcanzar un nivel máximo en el tercer trimestre de 2015 (cifras desestacionalizadas), la inversión se estancó, mostrando mayor debilidad desde el 3T2018. En el 1T2023 logró superar el último pico, pero tras más de siete años de rezago.
- Durante el sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador la inversión creció 14.47%. Esta tasa de crecimiento acumulado ha sido la segunda más baja de los últimos cuatro sexenios, por debajo de las administraciones de Felipe Calderón y Vicente Fox y solo por encima de la de Enrique Peña Nieto.
Desempeño de la inversión en México en el tercer trimestre de 2024
La inversión en el tercer trimestre de 2024 (3T2024) representó el 24.3% del PIB. México, ¿cómo vamos? tiene una meta para la inversión de 24% del PIB, para que esta sea un motor de crecimiento y genere empleos de calidad. El Semáforo de inversión se encuentra en verde.
- La inversión en el 3T2024 representó el 24.3% del PIB, superior al 23.7% registrado en el trimestre anterior (2T2024).
- En su interior, 21.6% del PIB proviene de la inversión privada, desde 21.0% en el 2T2024.
- El 2.7% del PIB proviene de la inversión pública, al igual que en el 2T2024.
- La inversión privada es el principal motor de formación de capital, por lo que fortalecer la certeza jurídica es fundamental para que esta no se desincentive.
La Formación Bruta de Capital Fijo (inversión) registró un crecimiento anual de 1.4% respecto al 3T2023 y un avance de 1.1% respecto al 2T2024.
En el tercer trimestre de 2024, el PIB y la inversión mostraron tasas anuales positivas. La inversión creció 1.4%, mientras el PIB creció 1.6%.
En sus comparaciones anuales, en el 3T2024 la inversión privada creció 2.7% y la pública presenta una variación negativa de (-)8.6%.
Desde finales de 2018 hasta el primer trimestre de 2021 tanto la inversión pública como privada mostraron tasas anuales negativas, principalmente debido mayor incertidumbre jurídica y después a la pandemia, factores que incrementaron la percepción de riesgo en el país.
Después de mantenerse rezagada hasta el 4T2022 respecto al nivel prepandemia, la inversión mostró una recuperación significativa a partir de ese periodo, seguida de aumentos constantes en los trimestres posteriores hasta alcanzar un máximo histórico en el cuarto trimestre de 2023. Sin embargo, durante el primer y segundo trimestre de 2024, se registraron contracciones trimestrales de (-)0.9% y (-)0.6%, respectivamente. Para el tercer trimestre de 2024, la inversión permanece ligeramente por debajo de su pico histórico alcanzado al cierre de 2023.
Cabe destacar que, después de alcanzar un nivel máximo en el 3T2015 (cifras desestacionalizadas), la inversión se debilitó y hasta el 1T2023 logró superar el último pico, tras más de siete años de rezago.
En el 3T2024, la inversión privada representa el 90% de la inversión total en México y el 21.6% como proporción del PIB. La inversión pública representa el 10% de la inversión total en México y el 2.7% como proporción del PIB.
La inversión privada registró incrementos trimestrales constantes durante 2022 y 2023, con la excepción del 3T2022. En 2024, experimentó una disminución en el primer trimestre, seguida de crecimientos en el segundo y tercer trimestre.
Por otro lado, la inversión pública tuvo un fuerte impulso al cierre de 2022 y en los primeros tres trimestres de 2023, aunque finalizó el cuarto trimestre con una caída trimestral de (-)1.4%. En 2024, mostró retrocesos trimestrales consecutivos durante los tres primeros trimestres del año.
Con el 3T2024 cerró el periodo presidencial de Andrés Manuel López Obrador. Al comparar la tasa de crecimiento acumulado de la inversión por sexenio, la del periodo de AMLO es la segunda más baja de los últimos cuatro sexenios. La primera tasa más alta se alcanzó en el sexenio de Felipe Calderón y la menor fue en el sexenio de Enrique Peña Nieto.
Para la nueva administración será necesario crear estrategias para evitar la desaceleración de la inversión pública y fomentar mayor entrada de inversión privada; estrategias que demandan certeza jurídica.
Fomentar mayores niveles de inversión tanto pública como privada en un país resulta el principal motor de crecimiento económico. De esta forma se alcanza una mayor producción, pero también se generan oportunidades laborales, tanto por su efecto inmediato sobre el PIB, como por las dinámicas que genera en la economía en el mediano y largo plazo.
No obstante, para que estas dinámicas se materialicen y tengan beneficios reales para la población, es crucial que los recursos se destinen a proyectos rentables y productivos. En el caso de la inversión pública, además, debe priorizarse la rentabilidad social. Solamente así se puede propiciar un entorno con crecimiento sostenido en la inversión, y a su vez, del crecimiento económico y el bienestar social.
El paquete económico 2025 establece que 79% del presupuesto de los programas prioritarios de inversión se dedicarán a trenes y únicamente 10.5% a obras hidráulicas. Esta asignación plantea interrogantes sobre el rezago en inversión hídrica considerando que, con datos del Índice de Progreso Social 2024, a nivel nacional 77% de los hogares tienen disponibilidad de agua dentro de la vivienda y solo 62% de los hogares tienen dotación diaria de agua; ambos indicadores muestran una disminución respecto al año anterior. Por esto, es fundamental evaluar si las inversiones prioritarias tienen una rentabilidad social alta y están dirigidas a mejorar directamente la calidad de vida de las personas.
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