Antecedentes
Abordar las elecciones de 2021 requiere de un análisis extenso, tanto por las candidaturas que se disputarán, como por el eventual reposicionamiento de las diversas fuerzas políticas que buscan recuperar los espacios perdidos. Dichas elecciones son consideradas las más grandes en la historia de nuestro país, y en ellas podrían consolidarse los principios constitucionales sobre paridad de género e igualdad. En este contexto, aquí se analiza el proceso electoral en el estado de Tlaxcala para conocer cómo está influyendo el principio de paridad y las cuotas de candidaturas para minorías en la elección de la gubernatura, diputaciones locales y federales, presidencias municipales y de comunidad.
La determinación que obligó a los partidos políticos a postular al menos a siete mujeres en las quince entidades en que se renuevan las gubernaturas en el año 2021 tuvo su mayor aplicación en Tlaxcala. En este estado, catorce de quince partidos políticos, de manera coaligada o individual, registraron a una mujer como su abanderada para dicho cargo.
El estado ha tenido sólo una gobernadora, la cual fue electa para el período 1987-1993 y que no concluyó, ya que en abril de 1992 solicitó licencia para incorporarse a la dirigencia nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI). En este período, la inclusión de las mujeres en cargos de este nivel apenas empezaba a ser parte del ejercicio de la democracia electoral: Beatriz Paredes fue apenas la segunda mujer en detentar una gubernatura en México, en lo que a la distancia puede apreciarse como un intento del régimen por mostrarse incluyente ante la opinión pública nacional e internacional. Su participación se dio en un contexto en el que el PRI aún no tenía competencia en Tlaxcala, por lo que su llegada como gobernadora sólo necesitó cumplir los plazos electorales. Esa situación es muy diferente a la que se plantea para el proceso electoral del año 2021: al menos hay dos candidaturas que parecen ser altamente competitivas debido a la cantidad de recursos que están desplegando durante la campaña.
En Tlaxcala ha habido gobernadores de distinta filiación partidista en los últimos cinco periodos: PRI (1993-1999), Partido de la Revolución Democrática (PRD) 1999-2005, Partido Acción Nacional (PAN) 2005-2011 y nuevamente PRI (2011-2017 y 2017-2021). Sin embargo, quienes encabezaron los gobiernos del PRD y del PAN fueron personas que rompieron con el PRI para contender en su contra; esto podría repetirse en el presente si gana la elección la persona que abandera la coalición encabezada por Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), ya que inició su carrera política en el PRI, para posteriormente pasar al PRD y ahora a Morena.
En cuanto a la integración del Congreso de Tlaxcala, la entidad ha tenido hasta el momento 63 legislaturas. La primera mujer que fue diputada local participó en la legislatura número 44 entre 1965 y 1967, lo que representaba un 14 % del total de los diputados que en ese entonces eran siete. Posteriormente, la inclusión de mujeres continuó siendo proporcionalmente reducida en comparación con los hombres; hasta antes de la reforma constitucional federal en materia de paridad, el porcentaje más elevado de mujeres que se alcanzó en una legislatura local fue apenas del 28 % del total de las diputaciones. Fue hasta la legislatura vigente —la número 63— que se alcanzó un porcentaje del 60 % de mujeres en la legislatura, lo anterior en razón de la resolución del tribunal electoral local que mandató al OPLE de Tlaxcala a que emitiera lineamientos temporales para garantizar la paridad. Estos lineamientos obligaron a los partidos políticos a incluir mujeres a la cabeza de sus listas de representación proporcional, lo que al término de la elección derivó en que por vez primera hubiese una mayoría de diputaciones encabezadas por mujeres en el Congreso local.
Contexto actual
En el proceso electoral local de Tlaxcala están en competencia 769 cargos. Además de la gubernatura, 25 diputaciones —15 de mayoría y 10 de representación proporcional— 60 presidencias municipales, 60 sindicaturas, 324 regidurías y 2991 presidencias de comunidad. La Ley Municipal del Estado de Tlaxcala considera estas presidencias como autoridades auxiliares de los ayuntamientos que: “[…] actuarán en sus respectivas circunscripciones como representantes de los ayuntamientos y, por consiguiente, tendrán de manera delegada las atribuciones que le sean necesarias para mantener en términos de esta ley el orden, la tranquilidad y la seguridad de los vecinos del lugar de su jurisdicción”. Al ser concurrentes con las elecciones federales, también se elegirán a los representantes de los tres distritos correspondientes.
Son 15 los partidos políticos que compiten; 10 de ellos con registro nacional y cinco locales. A ellos se agregan diversas candidaturas independientes (CI) a diputaciones y ayuntamientos. Tal número de cargos y candidaturas genera una complejidad para los partidos políticos; requiere una cantidad enorme de ciudadanos para ocupar las candidaturas, cifra que se acerca a las 18,000 personas entre candidatos propietarios y suplentes, que representan alrededor del 2 % del total de una lista nominal que asciende a poco más de 980 000 electores.2
Al cierre del registro de candidaturas para los ayuntamientos de la entidad se suscitó un conflicto jurídico que obligó al OPLE de Tlaxcala a posponer su dictamen sobre la aceptación de las candidaturas referidas. Se acusó a los partidos políticos de haber incumplido las cuotas de jóvenes y personas de la comunidad LGBTTTIQ. Se les dio cuarenta y ocho horas para subsanar dicha circunstancia, lo que retrasaría por algunas horas el inicio de las campañas municipales.
La razón de lo anterior fue que, una vez superada la paridad entre géneros en la asignación de candidaturas, el siguiente gran reto era la inclusión de algunas minorías que por su importancia político-social han reclamado justificadamente ser incorporadas a la representación popular en el congreso y en los cabildos municipales para llevar al primer plano la lucha por el reconocimiento a sus derechos humanos, incluidos sus derechos político-electorales. Integrantes de la comunidad LGBTTTIQ solicitaron al OPLE de Tlaxcala que emitiera lineamientos para garantizar una cuota de candidaturas para su grupo social que les diera la posibilidad de contar con diputaciones y regidurías. Esta solicitud fue negada por el órgano electoral; por lo tanto, los demandantes recurrieron a las instancias jurisdiccionales, a las que pidieron el consentimiento de su petición. Este hecho fue confirmado por los órganos jurisdiccionales electorales que mandataron al OPLE a que cumpliera con dicha resolución.
Como nota informativa sobre el contexto local de Tlaxcala cabe señalar dos aspectos: en primer lugar, la reforma político-electoral local aprobada por el Congreso estatal en 2020 fue anulada por la autoridad jurisdiccional federal por violaciones al procedimiento parlamentario. Por ello, las reformas relacionadas con la homologación en materia de paridad mandatada por el legislativo federal quedaron sin efecto; en segundo lugar, el mandato para que el OPLE de Tlaxcala expidiera lineamientos para incluir cuotas de la comunidad LGBTTTIQ se emitió posteriormente al inicio del registro de las candidaturas a diputaciones locales, por lo que ya no pudo aplicarse en el proceso electoral de 2021. Sin embargo, sí se aplicó en el caso de las planillas de ayuntamientos, cuyo registro iniciaba después del mandato jurisdiccional. El conflicto suscitado durante los registros de planillas para los ayuntamientos agravó las descalificaciones contra el OPLE de Tlaxcala que de tiempo atrás han hecho integrantes de Morena.
Cumplimiento de la paridad
En relación con la paridad en la postulación de candidaturas al Congreso local, los partidos políticos registraron un total de 161 fórmulas de mayoría relativa, 86 encabezadas por mujeres (53.4 %) y 75 por hombres (46.6 %); de esta manera, el requisito de paridad de género quedó más que cubierto en favor de las mujeres. En cuanto a las listas de diputaciones de representación proporcional, 11 partidos las encabezaron con hombres (73.3 %), y cuatro lo hicieron con mujeres (26.7 %); esto muestra una inclinación mayor en los partidos para favorecer a los hombres en la posibilidad de arribar al Congreso local por esta vía.
Cabe señalar que la mayoría de las mujeres que participan en la contienda electoral como candidatas de mayoría relativa son menos conocidas respecto a los hombres contra quienes compiten. Lo anterior hace evidente la necesidad de que los partidos políticos formen anticipadamente cuadros femeninos competitivos ya que, si bien puede cumplirse con la postulación paritaria mediante las cuotas de género, ello no basta para garantizar que las mujeres logren triunfos electorales en al menos la mitad de las demarcaciones de mayoría relativa.
En cuanto a la paridad en las candidaturas a la titularidad de las presidencias municipales registradas por los 15 partidos políticos que participan en el proceso electoral, resultaron 786 candidaturas totales, 50.38 % son mujeres y 49.62 % hombres. Con ello, el principio de paridad se cumplió tanto en lo particular de cada partido, como en el total de las candidaturas a presidente municipal.
Destaca que, de un total de 60 municipios, los cinco con la mayor población3 representan el 32.41 % de la población estatal de acuerdo a los resultados censales del INEGI de 2020. En ellos se registró un total de 70 candidaturas a presidentes municipales, pero la proporción por género está distante de la paridad: el 37.14 % corresponde a mujeres candidatas, y el 62.86 % a hombres. Esto exhibe que los partidos prefirieron postular a hombres en los municipios con el mayor potencial de voto, y ubicaron proporcionalmente en mayor cantidad a mujeres en los municipios con menor cantidad de población, y con menor ejercicio de recursos presupuestales.
La inclinación de los partidos políticos a favorecer mayoritariamente a los hombres con las candidaturas de los municipios política y económicamente más importantes es reflejo de la proporción por género en la titularidad de las dirigencias estatales de los partidos. De los 15 partidos, 12 son encabezados por hombres (80 %), dos (13.66 %) por mujeres,4 y la presidencia estatal5 de uno (6.33 %) no tiene titular.
En Tlaxcala la elección se ve influenciada por el contexto nacional, ya que la entidad ha sido mostrada en diversas mediciones como una en las que mayor aceptación tiene el presidente de la República. Esto representa el principal sustento político de la coalición encabezada por Morena. En términos políticos, la elección para la gubernatura juega como “locomotora” de las elecciones para diputaciones y ayuntamientos.
De las seis candidaturas8 a la gubernatura, dos —las de mayor competitividad— son impulsadas por coaliciones de partidos. La primera es Juntos Hacemos Historia, integrada por los partidos nacionales, Morena, del Trabajo y Verde Ecologista de México; y los partidos locales, Nueva Alianza Tlaxcala y Encuentro Social Tlaxcala. La segunda es Unidos por Tlaxcala, integrada por los partidos nacionales, PRI, PAN y PRD, y los partidos locales, Socialista, y Alianza Ciudadana. También hay cuatro candidaturas por una sola fuerza partidista: Movimiento Ciudadano, Fuerza por México, Redes Sociales Progresistas (único que postula a un hombre), y el partido local Impacto Social Sí.
Conclusiones
En Tlaxcala, la próxima jornada electoral resulta interesante no sólo por el probable arribo de una mujer a la gubernatura. También lo es por el posible efecto que el confinamiento obligado por la pandemia ha tenido en el diseño de campañas electorales por medios electrónicos y de comunicación masiva para captar la atención del electorado, y en la definición de estrategias para obtener el voto de los segmentos de indecisos y de quienes desconfían de las elecciones y de los partidos políticos.
Al término de la elección para renovar la gubernatura de Tlaxcala, así como las diputaciones locales y los ayuntamientos, quedará a debate la eventual respuesta a porqué fue ésta la entidad en la que porcentualmente hubo el mayor número de mujeres postuladas a la gubernatura. De igual manera, queda la interrogante de porqué esta tendencia no se reflejó en la postulación de candidaturas a las presidencias municipales de mayor población de la entidad. Algunas posibles respuestas son las siguientes:
1. En el caso de la gubernatura una coincidencia en la que los cuadros más competitivos de los partidos políticos eran mujeres.
2. Una muestra de la falta de aspirantes hombres competitivos a la gubernatura en los partidos políticos.
3. Los partidos políticos prefirieron reservar sus candidaturas encabezadas por hombres para entidades de mayor dimensión poblacional y económica.
4. En el caso de los ayuntamientos de la entidad con mayor población y, por tanto, con mayor potencial económico de votación, coincidió que los cuadros más competitivos de los partidos políticos eran hombres.
5. Una muestra de la falta de aspirantes mujeres competitivas a los ayuntamientos con mayor número de población dentro de los partidos políticos.
6. Los partidos políticos prefirieron reservar sus candidaturas encabezadas por hombres para municipios de mayor dimensión poblacional y económica.
Te invitamos a leer este artículo en Nexos.
Margarita Lumbreras Hernández
Profesora-Investigadora del Instituto de Ciencias de Gobierno y Desarrollo Estratégico de la BUAP.
José Luis Martínez Mejía
Director de Capacitación y Enlace Institucional del Tribunal Electoral de Tlaxcala.
——–
1 Existen 393 presidencias de comunidad en la entidad, pero solo 299 de ellas se eligen a través del sistema electoral de voto en urnas, las 94 restantes se rigen por el sistema de usos y costumbres, y renuevan a sus titulares en fechas, periodos de duración y formas diferentes.
2 Datos del INE reportados durante la entrega de la lista nominal al Instituto Tlaxcalteca de elecciones.
3 Tlaxcala, Huamantla, San Pablo del Monte, Apizaco y Chiautempan.
4 Los partidos que tienen presidenta estatal cuentan solo con registro local, Nueva Alianza Tlaxcala, y Socialista.
5 La delegada enviada por el comité nacional de Morena para encabezar temporalmente la dirigencia estatal renunció al cargo aduciendo no haber sido tomada en cuenta durante el proceso de designación de candidaturas.
6 Al Partido del Trabajo se le negó el registro de estas candidaturas por parte del OPLE de Tlaxcala, bajo el argumento de que incumplieron con las cuotas correspondientes a las minorías, el partido impugnó la resolución, la que a la fecha de integración de este texto está sin resolverse.
7 No incluye fórmulas de candidaturas independientes.
8 Inicialmente se registraron siete candidaturas, pero una de ellas, la impulsada por el Partido Encuentro Solidario declinó en favor de la candidata de la Coalición Unidos por Tlaxcala.