En el primer trimestre de 2021 persiste una caída económica de -2.8% respecto al primer trimestre del 2020, antes de que se observaran los efectos de la pandemia.
En el segundo trimestre de 2020, el PIB sufrió una caída trimestral de -16.9%, para luego crecer en el tercer y cuarto trimestre del año, a tasas trimestrales de 12.5% y 3.2%, respectivamente.
Aunque en el primer trimestre de 2021 se registró un crecimiento trimestral menor, el PIB continuó con su recuperación, creciendo 0.8% respecto al cuarto trimestre de 2020.
Hasta este el momento, se ha recuperado el 84% del valor que perdió el PIB durante el segundo trimestre de 2020, lo cual refleja que todavía queda camino por recorrer para lograr una recuperación completa.
En el primer trimestre del año 12 de los 20 sectores económicos reportaron crecimientos trimestrales positivos, pero aún no se observa una recuperación generalizada, resultado del profundo impacto de la crisis ocasionado por la COVID-19.
En los primeros tres meses del año, 14 sectores mostraron caídas su comparación anual, y solamente 6 crecieron en esta comparación.
Entre los sectores más afectados por la crisis sanitaria y las medidas de confinamiento implementadas por las autoridades se encuentran las actividades de esparcimiento, cultura y deporte y los servicios de hospitalidad (alojamiento y preparación de alimentos y bebidas).
A pesar de que estos dos sectores han recuperado parte de las pérdidas observadas durante los peores meses el año pasado, todavía no recuperan sus niveles pre pandemia, pues en el primer trimestre de 2021 todavía registraron caídas anuales de -45.5% y -33.5%, respectivamente.
En el otro extremo, las actividades dirigidas a servicios de salud y asistencia social y comercio al por mayor crecieron en su comparación anual a tasas de 8% y 6.1%, respectivamente. Además, los sectores de la construcción y las manufacturas -que en conjunto representan el 26% del PIB – mostraron tasas anuales de -7.3% y 1.2%.
De acuerdo con la organización México, ¿cómo vamos?, el análisis del comportamiento del PIB a nivel sectorial es particularmente relevante en el contexto de esta crisis económica, dado que, por su naturaleza, las restricciones sanitarias, así como las necesidades por sector económico son distintas.
Esta organización le da seguimiento al comportamiento de los 20 sectores que componen la actividad económica nacional a través de sus #Semáforos Sectoriales. Estos semáforos califican el crecimiento económico de cada sector y establecen metas para reflejar su desempeño: verde cuando la tasa anual de crecimiento es mayor a 4.5% anual, amarillo cuando está dentro de un rango de 3.4% a 4.5%, naranja cuando el nivel aumenta entre 0% y 3.4% y rojo cuando se registra una tasa anual negativa.
En particular, en el primer trimestre de 2021, 14 de los 20 sectores económicos tuvieron un #SemáforoSectorial en rojo, reflejo de una caída económica generalizada, 3 en naranja, 1 en amarillo y 2 en verde.
“Darle un seguimiento cercano al crecimiento del Producto Interno Bruto nacional resulta relevante para las familias mexicanas porque tanto sus empleos como sus ingresos, dependen de la evolución de la producción de bienes y servicios. La importancia de este indicador no radica sólo en la magnitud de la producción nacional, sino en lo que esto significa: mayores recursos para satisfacer las necesidades de las personas, mayores fuentes de empleo y, por ende, mayores niveles de ingreso”, señala.
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