El martes, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) actualizó el registro de trabajadores asegurados al cierre de septiembre de 2021. Se observó un incremento de 174 mil 096 puestos asegurados solo en septiembre y en lo que va de 2021 se agregaron 821 mil 187, el mayor acumulado para este para periodo desde que se tiene registro.
Al tercer trimestre de 2021 faltan 18 mil 617 puestos para que el registro del IMSS recupere su nivel de prepandemia. Utilizando datos desestacionalizados México, ¿cómo vamos? estima que la recuperación de los puestos de trabajo a causa de la pandemia de COVID-19 sea de 2 a 3 meses más rápida que la experimentada en la crisis de 2008.
Cabe destacar que la economía mexicana tiene un gran rezago en este rubro, pues durante 2020 no solo se perdieron 647 mil 710 puestos registrados, sino que desde febrero de 2020 se han dejado de crear nuevos empleos formales.
De acuerdo con el #SemáforoEconómico de México, ¿cómo vamos? , se tendrían que generar al menos 1.2 millones de puestos al año para poder emplear a quienes se incorporaron a la población económicamente activa.
Si bien hará falta compensar dicho rezago, por lo pronto los datos indican que México está cerca de alcanzar su nivel de empleo formal prepandemia. Utilizando cifras desestacionalizadas es posible analizar cuántos meses le tomaría a la economía recuperar el registro de los puestos de trabajo ante el IMSS y así comparar la dinámica del mercado laboral formal entre periodos.
Al considerar toda la economía del país, se encontró que el choque provocado por la pandemia de COVID-19 fue más profundo que el de la crisis Financiera Global de 2008, pero la recuperación en esta crisis ha sido más rápida.
La naturaleza de las crisis de 2008 y 2020 son distintas. Mientras que la primera comenzó en el sistema financiero a causa de las hipotecas subprime, la de 2020 por su origen sanitario obligó a tomar medidas de distanciamiento social y limitar las actividades que en los primeros meses también detuvieron a la industria.
A nivel sectorial, con datos desestacionalizados se observa que los servicios para empresas, personas y hogares muestran el menor ritmo de recuperación de puestos de trabajo registrados ante el IMSS. Este sector incluye a los servicios financieros, servicios inmobiliarios, el sector restaurantero y de alojamiento, los servicios de esparcimiento, entre otros servicios.
Al comparar su evolución con la crisis financiera global de 2008 se encontró que dicha crisis no tuvo un efecto particularmente adverso en los servicios, el sector más importante de la economía mexicana, al representar más del 66% de su total.
En la actualidad, los servicios para empresas, personas y el hogar aún no han recuperado el nivel que tenían antes de la pandemia. Tras 19 meses del inicio de la crisis por COVID-19. En contraste, durante la Crisis financiera global de 2008 lo hicieron en 14 meses.
Por otro lado, el ritmo de recuperación en la generación de puestos de trabajo más acelerado se encuentra en el sector de la Industria de la Transformación —esta incluye a todas las industrias manufactureras—. En el décimo mes después del choque por la pandemia de COVID-19, el nivel de puestos de trabajo ya era similar al observado previo al choque; en el caso de la crisis de 2008, el periodo de recuperación fue de 28 meses.
Similar al agregado, en el sector Construcción, el impacto de la crisis por COVID-19 fue más profundo que el impacto de la crisis del 2008. Sin embargo, el ritmo de recuperación ha sido más rápido en el caso más reciente, aunque el sector sigue sin recuperarse en su totalidad.
En el sector de Comercio, similar a lo experimentado por los Servicios para empresas, personas y el hogar, se observa un impacto más profundo y un menor ritmo de recuperación en la crisis por la pandemia. Para la crisis de 2008 el periodo de recuperación fue de 18 meses, mientras que para la crisis COVID-19, 19 periodos.
Finalmente, el sector de Transportes y comunicaciones presenta un ritmo de recuperación más acelerado que el agregado de todos los sectores. Transcurrieron 13 meses para que el sector recuperara el nivel previo al choque de la crisis por COVID-19 y a partir de entonces se observan tasas de crecimiento incrementales.
Al reactivarse las cadenas de valor global, estos servicios son indispensables para el funcionamiento de la economía global, prueba de ello es el alza de costos en los meses de reactivación económica asociados a transportes para mover mercancías y productos.